
DE VINO Y ESPEJOS
Tengo que reconocer, debo admitir,
en esta noche amarga de vino y espejos
que alegría sólo es algo que desaparece y regresa,
que regresa y se desvanece
en esta noche amarga de vino y reflejos
que normalmente sólo son lo que parecen.
Y entiéndeme si digo que quiero que termine
pero no quiero empezar, no quiero empezar de nuevo.
Y perdona si hoy no acepto este último vaso
en esta casa cualquiera,
ni esta noche amarga de vino y reflejos
que normalmente sólo son lo que parecen.
Y aunque no quieras irte y yo prefiera estar contigo
y aunque sea verdad que has sido así tantas otras veces, esta vez no.
Tengo que reconocer, debo admitir,
en esta noche amarga de vino y espejos...
Gracias...por estar siempre, aunque no te vea nunca...